...Yo estoy viejo, enfermo, cansado, desengañado, hostigado, calumniado y mal pagado. Yo no pido por recompensa más que el reposo y la conservación de mi honor; por desgracia es lo que no consigo" (...) "Por la libertad de mi patria he abandonado los blasones de una distinguida nobleza, me he visto privado de las delicias de una grande fortuna; he expuesto mi existencia por salvar la vida de mis conciudadanos; todas mis pasiones las he sacrificado a la salud pública y únicamente he conservado las que pueden contribuir a la destrucción de nuestros enemigos"...
... el que manda debe oír aunque sean las más duras verdades y, después de oídas, debe aprovecharse de ellas para corregir los males que produzcan los errores.
Amo la Libertad de la América más que mi gloria propia; y para conseguirla no he ahorrado sacrificios.
Si mi muerte contribuye para que cesen los partidos y se consolide la unión, yo bajaré tranquilo al sepulcro.
"Yo, amor, he aprendido a coser con tu nombre, voy juntando mis días, mis minutos, mis horas con tu hilo de letras"
"Las mañanas cambiaron su signo conocido. Ahora el agua, su tibieza, su magia soñolienta es diferente (...) Ya no hay oscuridad, ni barricadas, ni abuso del espejo retrovisor para ver si me siguen (...) Ya no huele a quemado, y no es la muerte una conocida presencia esperando a la vuelta de cualquier esquina. He recuperado mis flores amarillas y estos malinches de mayo son mas rojos y se desparraman de gozo reventados contra el rojinegro de las banderas."
"Tu cuerpo es el paraíso perdido del que nunca jamás ningún Dios podrá expulsarme."
" Recorrer un cuerpo en su extensión de vela es dar la vuelta al mundo Atravesar sin brújula la rosa de los vientos islas golfos penínsulas diques de aguas embravecidas no es tarea fácil -si placentera- No creas hacerlo en un día o noche de sábanas explayadas. Hay secretos en los poros para llenar muchas lunas"
"Duro decir: Te amo, mira cuánto tiempo, distancia y pretensión he puesto ante el horror de esa palabra, esa palabra como serpiente que viene sin hacer ruido, ronda y se niega una, dos, tres, cuatro, muchas veces, ahuyentándola como un mal pensamiento, una debilidad, un desliz, algo que no podemos permitirnos>"
"El hombre que me ame no querrá poseerme como una mercancía, ni exhibirme como un trofeo de caza, sabrá estar a mi lado con el mismo amor conque yo estaré al lado suyo."
"John Winston Lennon nació el 9 de octubre de 1940 en el Hospital de la Maternidad de Oxford Street, en Liverpool, durante un bombardeo de la aviación alemana. ... El futuro había llegado."Sin embargo la noche del 8 de diciembre es asesinado a quemarropa por David Chapman en el vestibulo del Edificio Dakota de Nueva York, su casa.""El hombre que destinó parte de su vida a la causa de la paz, que amó al mundo y supo crear uno de los sueños más hermosos de la historia, cayó de esta foma, victima de la violencia inutil del siglo XX. El futuro habia terminado"
Imaginate que no hay cielo, es fácil si lo intentas. No hay infierno bajo nosotros,sobre nosotros sólo firmamento. Imaginate toda la gente viviendo para hoy... Imaginate que no hay posesiones, me pregunto si podrás. Sin necesidad de codicia ni hambre, una hemandad de hombres. Imagnate toda la gentecompartiendo todo el mundo. Dirás que soy un soñador, pero no soy el único. Espero que algún día te unas a nosotros Y el mundo será sólo uno.
(...) Todo es mío, porque a través del calabozo de aire que es mi pecho, ningún abrazo, ningún beso, ningún halago, me podrá estrechar así: Con la libertad de una gota de lluvia no caída, con la lentitud de las ramas sobre mi pelo, con el eco de tu voz, atorado en la garganta, como el viento húmedo que traspasa mis labios. Lejos de ti, es este mi territorio, donde no aguardo falsas esperanzas, donde no me azora el ceño fruncido de la duda.
Somos yo y las horas oscuras, frente a ti, piel de noche, zorro merodeando en mis arterias, robándome el pálpito sereno.
Es mía esta noche, porque en su furia apagada soltaré mi concilio, me dejaré abrazar en su intemperie, muy lejos ya del desierto vasto de lo que no pasó entre tú y yo.
Hay que dejar que los olvidos se derritan en el patio de atrás.
Según nuestros más anteriores, al cielo hay que sostenerlo para que no se caiga. O sea que el cielo no mero está firme, sino que cada tanto se pone débil y como que se desmaya y se deja caer así nomás como se caen las hojas de los árboles, y entonces puras calamidades que pasan porque llega el mal a la milpa y la lluvia lo rompe todo y el sol castiga al suelo y es la guerra quien manda y es la mentira quien vence y es la muerte quien camina y es el dolor quien piensa.
(...) Entonces el cielo no está mero firme, sino que a veces como que se afloja. Y has de saber que cuando esto pasa, se desarreglan los vientos y las aguas, el fuego se inquieta y la tierra da en levantarse y caminarse sin encontrar dónde estarse sosiega. Por eso dijeron los que antes de nosotros se llegaron, que, pintados de colores diferentes, cuatro dioses se regresaron al mundo y, haciéndose gigantes, se pusieron en las cuatro esquinas del mundo para agarrarlo al cielo para que no se cayera y se estuviera quieto y bien planito, para que sin pena lo caminaran el sol y la luna y las estrellas y los sueños. (...)Así pasó desde el principio, por eso los dioses primeros, los que nacieron el mundo, dejaron encargado a uno de los sostenedores del cielo y él debe estarse pendiente para leer el cielo y ver cuando empieza a aflojarse, y entonces este sostenedor debe hablarle a los otros sostenedores para que despierten y vuelvan a tensar su lado y las cosas se acomoden de nuevo. Y este sostenedor nunca duerme, siempre debe estar alerta y pendiente para despertar a los demás cuando el mal se cae sobre la tierra. Y dicen los más antiguos en el paso y la palabra que este sostenedor del cielo lleva en el pecho colgado un caracol y con él escucha los ruidos y silencios del mundo para ver si todo está cabal, y con el caracol los llama a los otros sostenedores para que no se duerman o para que se despierten.
Y dicen aquellos que más primero fueron que, para no dormirse, este sostenedor del cielo va y viene dentro y fuera de su propio corazón, por los caminos que lleva en el pecho, y dicen aquellos enseñadores antiguos que este sostenedor enseñó a los hombres y mujeres la palabra y su escritura porque, dicen, mientras la palabra camine el mundo es posible que el mal se aquiete y esté el mundo cabal, así dicen.
Por eso la palabra del que no duerme, del que está pendiente del mal y sus maldades, no camina directo de uno a otro lado, sino que anda hacia sí misma, siguiendo las líneas del corazón, y hacia fuera, siguiendo las líneas de la razón, y dicen los sabedores de antes que el corazón de los hombres y mujeres tiene la forma de un caracol, y quienes tienen bueno su corazón y su pensamiento se andan de uno a otro lado, despertando a los dioses y a los hombres para que se estén pendientes de que el mundo se esté cabal. Por eso, quien vela cuando los demás duermen usa su caracol, y lo usa para muchas cosas, pero sobre todo para no olvidar.
Hoy es tu cumpleaños, estarías cumpliendo apenas 31 años.
La ausencia vuelve a tocar en la memoria, pensando que encontraré tu voz al otro lado del teléfono, que abrazaré tu sonrisa al visitarte, que compartiremos la música, la poesía y unos buenos tragos mientras nos contamos la historia del tiempo en que no nos hemos visto. sin embargo hoy sólo te escribo en la añoranza del tiempo compartido, en la ausencia de la amiga que hoy me hace falta.
me retuerzo doy vueltas
te busco y no estás y estás allí tan cerca.
ASUNCIÓN DE TI
(de tus escritos favoritos Benedetti)
Quién hubiera creído que se hallaba sola en el aire, oculta, tu mirada.
Quién hubiera creído esa terrible ocasión de nacer puesta al alcance de mi suerte y mis ojos, y que tú y yo iríamos, despojados de todo bien, de todo mal, de todo, a aherrojarnos en el mismo silencio, a inclinarnos sobre la misma fuente para vernos y vernos mutuamente espiados en el fondo, temblando desde el agua, descubriendo, pretendiendo alcanzar
quién eras tú detrás de esa cortina,quién era yo detrás de mí. Y todavía no hemos visto nada. Espero que alguien venga, inexorable, siempre temo y espero, y acabe por nombrarnos en un signo, por situarnos en alguna estación por dejarnos allí, como dos gritos de asombro.
Pero nunca será. Tú no eres ésa, yo no soy ése, ésos, los que fuimos antes de ser nosotros. Eras sí pero ahora suenas un poco a mí. Era sí pero ahora vengo un poco de ti. No demasiado, solamente un toque, acaso un leve riesgo familiar, pero que fuerce a todos a abarcarnos a ti y a mí cuando nos piensen solos.
Acá sólo algunas rolas de tus grupos favoritos...
Y SI PUDIERA VIAJAR ENTRE LOS CABLES DEL TELEFONO?? PODRÍA LLEGAR HACIA TI.
PENETRAR EN TU OIDO LENTAMENTE, Y RECORRER TUS VENAS, PODRÍA INCLUSO LLEGAR AL FONDO DE TU CORAZÓN.
EN CADA PARTE DE TU CUERPO ME DETENDRÉ Y DESCANZARÉ,
Y LA PROXIMA NOCHE, CUANDO TODOS DUERMAN, TE VOLVERÉ A MARCAR. (alaMado)
Dos cuerpos frente a frente son a veces dos olas y la noche es océano. Dos cuerpos frente a frente son a veces dos piedras y la noche desierto. Dos cuerpos frente a frente son a veces raíces en la noche enlazadas. Dos cuerpos frente a frente son a veces navajas y la noche relámpago.
LA CALLE
Es una calle larga y silenciosa. Ando en tinieblas y tropiezo y caigo y me levanto y piso con pies ciegos las piedras mudas y las hojas secas y alguien detrás de mí también las pisa:si me detengo, se detiene; si corro, corre. Vuelvo el rostro: nadie. Todo está oscuro y sin salida, y doy vueltas y vueltas en esquinas que dan siempre a la calle donde nadie me espera ni me sigue, donde yo sigo a un hombre que tropieza y se levanta y dice al verme: nadie.
Lo sé, amada: ahora se me cae el pelo por mi vida salvaje, y me tumbo en las piedras. Me veis beber el aguardiente más barato, y camino desnudo al viento.
Cuando me haces pasármelo tan bien, a veces pienso: si me muriera ahora habría sido feliz hasta el final.
Cuando tú seas vieja y me recuerdes piénsame como hoy y tendrás un amor que siga siendo joven.
Desde aquel día muchas, muchas lunas se han zambullido en silencio y han pasado. Los ciruelos habrán sido arrancados y si me preguntas ¿qué fue de aquel amor? entonces te contesto: no consigo acordarme, pero aun así, es cierto, sé a qué te refieres. Aunque su rostro, de verdad, no lo recuerdo, ahora sé tan sólo que entonces la besé.
Tenías miedo de mi carne mortal y en ella buscabas
el alma inmortal. Para encontrarla, a palabras duras,
me abrías grandes heridas.
Entonces te inclinabas sobre ellas y aspirabas,
terrible, el olor de mi sangre.
La vida tuya sangre mía abona
y te amo a muerte, te amo;
si pudiera
bajo los cielos negros
te comiera el corazón con dientes de leona.
...este dolor mortal en que me abismo
esta inmovilidad del sentimiento,
que sólo salta bruscamente cuando
nada es posible.
DIENTES DE FLORES, COFIA DE ROCÍO...
Último poema antes de suicidarse.
Dientes de flores, cofia de rocío,
manos de hierbas, tú, nodriza fina,
tenme prestas las sábanas terrosas
y el edredón de musgos escardados.
Voy a dormir, nodriza mía, acuéstame.
Ponme una lámpara en la cabecera;
una constelación, la que te guste;
todas son buenas, bájala un poquito.
Déjame sola; oyes romper los brotes...
te acuna un pie celeste desde arriba
y un pájaro te traza unos compases
para que olvides... Gracias... Ah, un encargo:
si él llama nuevamente por teléfono
le dices que no insista, que he salido.
¡Qué costumbre tan salvaje esta de enterrar a los muertos!, ¡de matarlos, de aniquilarlos, de borrarlos de la tierra! Es tratarlos alevosamente, es negarles la posibilidad de revivir (...) Había de tener una casa de reposo para los muertos, ventilada, limpia, con música y con agua corriente. Lo menos dos o tres, cada día, se levantarían a vivir.
Cuando tengas ganas de morirte esconde la cabeza bajo la almohada y cuenta cuatro mil borregos. Quédate dos días sin comer y veras qué hermosa es la vida: carne, frijoles, pan. Quédate sin mujer: verás. Cuando tengas ganas de morirte no alborotes tanto: muérete y ya.
Partir en cuerpo y alma partir.
Partir deshacerse de las miradas,
piedras opresoras que duermen en la garganta.
He de partir no más inercia bajo el sol no más sangre anonadada no más fila para morir. He de partir.
Hay cementerios solos, tumbas llenas de huesos sin sonido, el corazón pasando un túnel oscuro, oscuro, oscuro, como un naufragio hacia adentro nos morimos, como ahogarnos en el corazón, como irnos cayendo desde la piel al alma. Hay cadáveres, hay pies de pegajosa losa fría, hay la muerte en los huesos, como un sonido puro, como un ladrido sin perro, saliendo de ciertas campanas, de ciertas tumbas, creciendo en la humedad como el llanto o la lluvia.
Del nicho helado en que los hombres te pusieron,
te bajaré a la tierra humilde y soleada.
Que he de dormirme en ella los hombres no supieron,
y que hemos de soñar sobre la misma almohada.
Te acostaré en la tierra soleada con una dulcedumbre de madre para el hijo dormido, y la tierra ha de hacerse suavidades de cuna al recibir tu cuerpo de niño dolorido.
Y soy Mujer... no de minifalda, ni escote pronunciado,
Soy Mujer... De grandes pechos, de curvas candentes, ojos penetrantes, ni abnegada, ni sumisa,
Soy Mujer... De piernas gruesas, manos pequeñas, melena alborotada, ni objeto sexual, ni protectora,
Soy Mujer... De labios carnosos, corazón indomable, vulva caprichosa, ni esclava, ni ama de casa,
Soy Mujer... Inteligente, libre y decidida, ni crédula, ni compasiva,
Soy Mujer... De carácter fuerte, vengativa, apasionada, ni liviana, ni recatada,
Soy Mujer... De mente abierta, piel morena friolenta, ni tímida, ni débil,
Soy Mujer... Y todos los días mi vagina me lo dice:
SOY MUJER!!
...Tus ojos se han cerrado eternamente, tus labios resecos de dolor se despiden en silencio.
Esperando el amanecer para marcharte ya, mientras que la música deja de tocar,
Silbido del viento, junto con las ruidosas hojas del triste otoño.
Tu agonía indomable se apodera de la media noche, cubriendo el manto con millones de estrellas.
Ya te has marchado y tu esencia aun se respira... (alaMado)
LA MAGIA DE LA LUNA. (alaMado)
Luna... belleza radiante, mujer de día y dama de noche,
Luna... que guías a las almas en pena, a espectros, fantasmas, noctámbulas,
Luna... sangre de mujer cada veintiocho días, protectora de vientres, flora y fauna,
Luna... testiga del amor, de la pasión, del deseo y la traición,
Luna... reina de la oscuridad que embelleces el infinito, que calmas océanos, volcanes y vientos,
Luna... tu magia es mi magia blanca de hechicera, tu sangre es mi sangre de mujer, acógeme hoy en tu vientre luna, protégeme de todo mal te lo pido oh!! Luna...
40 Aniversario de la brutal masacre por parte de las fuerzas policiacas y el ejercito, durante el gobierno de Diaz Ordaz, a hombres y mujeres, obreros, mujeres, niños, niñas, estudiantes...
No olvidar el 2 de octubre de 1968 conlleva mucho más que levantar pancartas, alzar la voz con consignas y marchar homenajeando a los compañeros caídos. No olvidar es asumir el legado de una lucha que se fue amasando y madurando en el corazón del pueblo mexicano y principalmente de sus jóvenes como respuesta al régimen autoritario que se revelaba como una actitud del gobierno declarada, abierta y crudamente en contra de la organización social. La represión se hizo presente antes de 1968, sexenios atrás, para desarticular las movilizaciones obreras de los ferrocarrileros, petroleros y maestros que denunciaban injustas condiciones salariales y la nula democracia sindical.
Tlatelolco 1968 ( Jaime Sabines) Nadie sabe el número exacto de los muertos, ni siquiera los asesinos, ni siquiera el criminal. Ciertamente ya llegó a la historia este hombre pequeño por todas partes, incapaz de todo menos del rencor.
Tlatelolco será mencionado en los años que vienen como ho hablamos de Rio Blanco y Cananea, pero esto fue peor, aquí han matado al pueblo: no eran obreros parapetados en la huelga, eran mujeres y niños, estudiantes, jovencitos de quince años, una muchacha que iba al cine, una criatura en el vientre de su madre, todos barridos, certeramente acribillados por la metralla del Orden y la Justicia Social.
MEMORIAL DE TLATELOLCO Rosario Castellanos La oscuridad engendra la violencia y la violencia pide oscuridad para cuajar el crimen. Por eso el dos de octubre aguardó hasta la noche para que nadie viera la mano que empuñaba el arma, sino sólo su efecto de relámpago. (...) ¿Quién? ¿Quiénes? Nadie. Al día siguente, nadie. La plaza amaneció barrida; los periódicos dieron como noticia principal el estado del tiempo. Y en la televisión, en la radio, en el cine no hubo ningún cambio de programa, ningún anuncio intercalado ni un minuto de silencio en el banquete. (Pues prosiguió el banquete.) (...)Recuerdo, recordamos. Ésta es nuestra manera de ayudar a que amanezca sobre tantas conciencias mancilladas, sobre un texto iracundo, sobre una reja abierta, sobre el rostro amparado tras la máscara. Recuerdo, recordemos Hasta que la justicia se siente entre nosotros.
(...) hay rostros de verdad que alumbraron mis fábulas rostros que no vi más pero siguieron vigilándome desde la letra en que los puse
hay fantasmas de carne otros de hueso también los hay de lumbre y corazón o sea cuerpos en pena almas en júbilo que vi o toqué o simplemente puse a secar, a vivir, a gozar , a morirse (...)
ROSTRO DE VOS Tengo una soledad tan concurrida tan llena de nostalgias y de rostros de vos de adioses hace tiempo y besos bienvenidos de primeras de cambio y de último vagón. Tengo una soledad tan concurrida que puedo organizarla como una procesión por colores tamaños y promesas por época por tacto y por sabor. Sin un temblor de más, me abrazo a tus ausencias que asisten y me asisten con mi rostro de vos. Estoy lleno de sombras de noches y deseos de risas y de alguna maldición. Mis huéspedes concurren, concurren como sueños con sus rencores nuevos su falta de candor. Yo les pongo una escoba tras la puerta porque quiero estar solo con mi rostro de vos. Pero el rostro de vos mira a otra parte con sus ojos de amor que ya no aman como víveres que buscan a su hambre miran y miran y apagan la jornada. Las paredes se van queda la noche las nostalgias se van no queda nada. Ya mi rostro de vos cierra los ojos. Y es una soledad tan desolada.
Puedo escribir los versos más tristes está noche.Escribir, por ejemplo: «La noche esta estrellada,y tiritan, azules, los astros, a lo lejos». El viento de la noche gira en el cielo y canta. Puedo escribir los versos más tristes esta noche.Yo la quise, y a veces ella también me quiso (...).
POEMA XVIII
Aquí te amo y en vano te oculta el horizonte. Te estoy amando aún entre estas frías cosas. A veces van mis besos en esos barcos graves, que corren por el mar hacia donde no llegan. Ya me veo olvidado como estas viejas anclas.
Son más tristes los muelles cuando atraca la tarde. Se fatiga mi vida inútilmente hambrienta. Amo lo que no tengo. Estás tú tan distante. Mi hastío forcejea con los lentos crepúsculos. Pero la noche llega y comienza a cantarme.
La luna hace girar su rodaje de sueño. Me miran con tus ojos las estrellas más grandes. Y como yo te amo, los pinos en el viento, quieren cantar tu nombre con sus hojas de alambre.
Alta, esbelta, de luto, en pena majestuosa, pasó aquella muchacha.
Con su mano fastuosa casi apartó las puntas del velo que llevaba.
Ágil y ennoblecida por sus piernas de diosa, me hizo beber crispado, en un gesto demente, en sus ojos el cielo y el huracán latente; el dulzor que fascina y el placer que destroza.
Relámpago en tinieblas, fugitiva belleza, por tu brusca mirada me siento renacido.
¿Volveré acaso a verte? ¿Serás eterno olvido? ¿Jamás, lejos, mañana?, pregunto con tristeza. Nunca estaremos juntos. Ignoro adónde irías. Sé que te hubiera amado. Tú también lo sabías.
¿Qué importa que tu puñal Se me clave en el riñón?
¡Tengo mis versos, que son Más fuertes que tu puñal! ¿Qué importa que este dolor Seque el mar, y nuble el cielo?
El verso, dulce consuelo, Nace a lado del dolor.
Aquí está el pecho, mujer, Que ya sé que lo herirás; ¡Mas grande debiera ser, Para que lo hirieses más! Porque noto, alma torcida, Que en mi pecho milagroso, Mientras más honda la herida, Es mi canto más hermoso.
"¿En qué lugar, en dónde, a qué deshoras me dirás que te amo? Esto es urgente porque la eternidad se nos acaba..." Los amorosos son locos, sólo locos, sin Dios y sin diablo.
AMOR MÍO, MI AMOR, AMOR HALLADO... Amor mío, mi amor, amor hallado de pronto en la ostra de la muerte.Quiero comer contigo, estar, amar contigo,quiero tocarte, verte. Me lo digo, lo dicen en mi cuerpo los hilos de mi sangre acostumbrada, lo dice este dolor y mis zapatos y mi boca y mi almohada. Te quiero, amor, amor absurdamente,tontamente, perdido, iluminado, soñando rosas e inventando estrellas y diciéndote adiós yendo a tu lado. Te quiero desde el poste de la esquina, desde la alfombra de ese cuarto a solas, en las sábanas tibias de tu cuerpo donde se duerme un agua de amapolas. Cabellera del aire desvelado, río de noche, platanar oscuro,colmena ciega, amor desenterrado, voy a seguir tus pasos hacia arriba, de tus pies a tu muslo y tu costado.
La poesía es un sabroso vino de la imaginación, que, moderado, alegra el espíritu, regala el entendimiento, deleita la fantasía y menoscaba la tristeza
(...) Yo camino buscando tu sonrisa de nube,tu sonrisa de ala, tu sonrisa de fiebre. Yo voy por el amor, por el heroico vino que revienta los labios. Vengo de la tristeza, de la agria cortesía que enmohece los ojos. Pero el amor es lento, pero el amor es muerte resignada y sombría: el amor es misterio, es una luna parda, larga noche sin crímenes, río de suicidas fríos y pensativos, fea y perfecta maldad hija de una Poesía que todavía rezuma lágrimas y bostezos, oraciones y agua, bendiciones y penas. (...)
"...Tu boca se me marcha de mi boca y regresa con varios besos muertos..."
No te asomes a la ventana,
que no hay nada en esta casa.
Asómate a mi alma.
No te asomes al cementerio, que no hay nada entre estos huesos.
Todo está lleno de ti, y todo de mí está lleno: llenas están las ciudades, igual que los cementerios de ti, por todas las casas, de mí, por todos los cuerpos.
Por las calles voy dejando algo que voy recogiendo: pedazos de vida mía venidos desde muy lejos.
Voy alado a la agonía, arrastrándome me veo en el umbral, en el fondo latente del nacimiento. Todo está lleno de mí: de algo que es tuyo y recuerdo perdido, pero encontrado alguna vez, algún tiempo.
Tiempo que se queda atrás decididamente negro, indeleblemente rojo, dorado sobre tu cuerpo.
Todo está lleno de ti, traspasado de tu pelo: de algo que no he conseguido y que busco entre tus huesos.
8 de agosto de 2008
“El poder es un club exclusivo. La ‘sociedad del poder’ tiene reglas, y sólo se puede acceder a ella si se cumplen. Cualquiera que busque la justicia, la libertad, la democracia, el respeto a la diferencia, no tiene posibilidad de acceder ahí, a menos que claudique de esas ideas.”
"Sé que tengo cáncer. Lo que quiero decir antes de morir es que odio a los psiquiatras. En el hospital de Rodez yo vivía bajo el terror de una frase: "El señor Artaud no come hoy, pasa al electroshock". Sé que existen torturas más abominables. Pienso en Van Gogh, en Nerval, en todos los demás. Lo que es atroz es que en pleno siglo XX un médico se pueda apoderar de un hombre y con el pretexto de que está loco o débil hacer con él lo que le plazca. Yo padecí cincuenta electroshocks, es decir, cincuenta estados de coma. Durante mucho tiempo fui amnésico. Había olvidado incluso a mis amigos: Marthe Robert, Henri Thomas, Adamov; ya no reconocía ni a Jean Louis Barrault. Aquí en Ivry sólo el doctor Delmas me hizo bien; lamentablemente murió...-Estoy asqueado del psicoanálisis, de ese "freudismo" que se las sabe todas".
Matamos lo que amamos. Lo demás no ha estado vivo nunca. Ninguno está tan cerca. A ningún otro hiere un olvido, una ausencia, a veces menos. Matamos lo que amamos. ¡Que cese ya esta asfixia de respirar con un pulmón ajeno! El aire no es bastante para los dos. Y no basta la tierra para los cuerpos juntos y la ración de la esperanza es poca y el dolor no se puede compartir. (...) Damos la vida sólo a lo que odiamos.
ACCIDENTE Temí… no el gran amor. Fui inmunizada a tiempo y para siempre con un beso anacrónico y la entrega ficticia -capaz de simular hasta el rechazo- y por el juramento, que no es más retórico porque no es más solemne. No, no temí la pira que me consumiría sino el cerillo mal prendido y esta ampolla que entorpece la mano con que escribo.
Caminares Tengo el cuerpo todo lleno de palabras. En los análisis de sangre, siempre aparecen más palabras que glóbulos: —El colesterol está dentro de los límites, pero las palabras... —me dice el médico, y frunce el ceño. Las palabras me caminan adentro, mientras yo camino. En mis ires y venires a lo largo de la costa de Montevideo, las palabras van y vienen todo a lo largo de mí: ellas se buscan, se encuentran, se juntan, y juntas crecen y se van convirtiendo en cuentos que quieren ser contados. Entonces las palabras golpean a las puertas de mi cuerpo, la puerta de la boca, la puerta de la mano, queriendo salir, queriendo darse, mientras yo me dejo ir por la orilla del río ancho como mar. Fue a la orilla de ese río-mar donde alguna vez también yo golpeé a las puertas de un cuerpo, queriendo salir, queriendo darme, y fui nacido.
El Nacedor ¿Por qué será que el Che tiene esta peligrosa costumbre de seguir naciendo? Cuanto más lo insultan, lo manipulan, lo traicionan, más nace. El es el más nacedor de todos. ¿No será porque el Che decía lo que pensaba, y hacía lo que decía? ¿No será que por eso sigue siendo tan extraordinario, en un mundo donde las palabras y los hechos muy rara vez se encuentran, y cuando se encuentran no se saludan, porque no se reconocen?
Como libros abiertos, llenos de citas, llegan a las reuniones dejando caer nombres, obras y fechas como trofeos, esgrimiendo la lógica hasta el final de las consecuencias. Así quieren hacernos a su modo algunos poetas, siguiendo la vieja tradición paternalista tratan de adoptarnos a falta de poder apresar el viento, la fruta prohibida, la misteriosa fertilidad de nuestros poemas.
Ojalá pudiera vivir solamente en éxtasis, haciendo el cuerpo del poema con mi cuerpo, rescatando cada frase con mis días y con mis semanas, infundiéndole al poema mi soplo a medida que cada letra de cada palabra haya sido sacrificada en las ceremonias del vivir.
La soledad no es estar parada en el muelle, a la madrugada, mirando el agua con avidez. La soledad es no poder decirla por no poder circundarla por no poder darle un rostro por no poder hacerla sinónimo de un paisaje. La soledad sería esta melodía rota de mis frases.
Antaño, si mal no recuerdo, mi vida era un festín donde corrían todos los vinos, donde se abrían todos los corazones.Una noche, senté a la Belleza en mis rodillas. Y la encontré amarga. Y la injurié.Yo me he armado contra la justicia.Yo me he fugado. ¡Oh brujas, oh miseria, odio, mi tesoro fue confiado a vosotros!Conseguí desvanecer en mi espíritu toda esperanza humana. Sobre toda dicha, para estrangularla, salté con el ataque sordo del animal feroz.Yo llamé a los verdugos para morir mordiendo la culata de sus fusiles. Invoqué a las plagas, para sofocarme con sangre, con arena. El infortunio fue mi dios. Yo me he tendido cuan largo era en el barro. Me he secado en la ráfaga del crimen. Y le he jugado malas pasadas a la locura.Y la primavera me trajo la risa espantable del idiota.
"Siempre he admirado al malo, al forajido, al hijo de puta. No me gustan los buenos chicos de pelo corto, corbata y un buen empleo. Me gustan los hombres desesperados, los hombres con los dientes rotos y el cerebro roto... No me gustan las leyes, la moral, las religiones, las reglas. No me gusta dejarme moldear por la sociedad".
LOS AMIGOS En el tabaco, en el café, en el vino, al borde de la noche se levantan como esas voces que a lo lejos cantan sin que se sepa qué, por el camino.
Livianamente hermanos del destino, dióscuros, sombras pálidas, me espantan las moscas de los hábitos, me aguantan que siga a flote entre tanto remolino.
Los muertos hablan más pero al oído, y los vivos son mano tibia y techo, suma de lo ganado y lo perdido.
Así un día en la barca de la sombra, de tanta ausencia abrigará mi pecho esta antigua ternura que los nombra.